Enseñando "Física y Química " en el siglo XXI
Antonio Pérez, Profesor de Física y Química del IES Sierra Luna (Los Barrios, Cádiz)
Ha sido nominado como mejor docente de España en la etapa de Educación Secundaria en los Premios "Educa Abanca" en la edición de 2021. Estos Premios buscan mejorar la visibilidad de la buena práctica docente entre la sociedad.
Se adjunta entrevista realizada en "EL Mundo" por Silvia Moreno (15/2/2022)
"A final de este mes, recoge el galardón
como mejor profesor de Educación Secundaria y Bachillerato en los premios
Abanca. ¿Cuál es su secreto?
El
secreto es que te guste lo que haces: dar clase, estar con los niños y
trabajar. Se me reconoce por cosas que hago fuera del horario escolar, como los
vídeos que cuelgo en YouTube. Lo aplico con mis alumnos en clase, pero lo
preparo en mi tiempo libre.
Da clases de Física y Química, una
asignatura que no goza de muy buena fama entre los alumnos.
Sí.
Junto con Matemáticas, son las dos asignaturas que menos le gusta a la mayoría
de los alumnos. Son duras.
Con asignaturas así es más difícil
conectar con los chavales, pero usted les habla en su lenguaje.
Sí,
empecé con mi canal de YouTube hace ocho años. Va sobre experimentos que hacen
los alumnos, no sólo de Física y Química, sino de Ingeniería, Biología...
Eligen el material, buscan la explicación científica, lo graban, lo editan y lo
subimos al canal. Eso es ya una inyección de motivación impresionante para
ellos. Ya por ahí los enganchas.
¿Los métodos tradicionales ya no funcionan
en el aula?
Es
que no funcionan desde hace siglos, diría yo. Cuando yo estudié, la metodología
tradicional es lo que había y, como había un respeto por los docentes, no
protestabas mucho. Pero el alumnado del siglo XXI está acostumbrado a moverse
en las redes, en canales de vídeos, dicen lo que piensan, lo que les gusta y lo
que no. La metodología tradicional ya no vale con ellos. ¿A ti te gustaría que
te operase un cirujano del siglo XVIII? Es lo que estamos haciendo en la
educación. La metodología que se imparte, en un porcentaje muy alto, es la
clase magistral, donde el profe explica y manda ejercicios. En
Secundaria, seis horas consecutivas, una y otra vez, con la misma metodología,
los propios alumnos dicen que desconectan a la segunda o tercera hora. Tienes
que aplicar metodologías innovadoras, en las que el alumno sea realmente el
protagonista del aprendizaje. De clases magistrales, nada. Hace años que no las
doy.
¿Cuántos años lleva dando clases?
Unos
25 años. En Secundaria, empecé como todos, con las clases magistrales, pero
desde el principio introduje cambios porque veía que llegabas a enganchar a un
porcentaje de alumnos, pero había otro que no. El primer cambio gordo fue
aplicar el aprendizaje basado en proyectos. Fue hace ocho cursos y, como fue
muy bien, empecé hace cuatro años con el aula invertida, con los canales de vídeo.
Y también fue muy bien.
¿Cómo es su día a día en el aula?
A
los chavales les pongo un vídeo que tengo subido en el canal de YouTube Antonioprofe que
deben ver en casa. Dura unos diez minutos. En clase, vemos qué dudas tienen y,
en grupo, intento que las resuelvan entre ellos. Luego, empiezan con los
ejercicios. En el aula hacemos esto o charlamos. Si hay un tema de actualidad u
otro como las drogas. Hablamos sobre la química de las drogas, los efectos que
tienen...
Un tema que a ellos les interesa, pero
llevan su ración de Química...
Sí,
Química, y también los educas en valores... Otro día, hablamos de satélites,
con la electrólisis, discutimos sobre cómo funciona el coche de hidrógeno, la
pila de combustible, Tesla, los modelos de vehículos que a ellos les gustan...
Quieres que aprendan Química y les llega porque se crea un ambiente en el que
le vas metiendo conceptos de la asignatura en medio de otras cosas. Y se les
queda, que es lo importante.
Claro, porque habrá quien se pregunte,
¿pero los alumnos aprenden Física y Química?
Los
compañeros me decían que estaba loco porque los de Segundo de Bachillerato
tienen que hacer la Selectividad y el método que aplico es el mismo. Me
advertían que no me iba a dar tiempo de dar el temario, pero a mí me sobra un
mes y me da tiempo de repasar. Mi alumnado cuenta con una media de entre un
punto y dos por encima de la media andaluza en Selectividad.
Y la tabla periódica de los elementos,
¿les obliga a memorizarla?
Todos
los compañeros que han pasado por mi instituto les obligan a aprendérsela, yo
no. Les dejo la tabla. Solo a mitad de Segundo de Bachillerato se las quito
porque en Selectividad no la van a tener. Los últimos seis meses no están con
ella, pero la han trabajado durante tanto tiempo que se la saben sin darse. Y
no han tenido que dedicar horas y horas a memorizar algo que no tiene sentido.
Para muchos, este primer contacto con la
asignatura para aprenderse la tabla de elementos les hace huir despavoridos.
Es
que ni en la Facultad de Química obligan a aprendérsela. Al final, te la sabes,
pero nadie te dice que te la tienes que aprender. Por eso, veo ilógico que se
les obligue en los institutos. No tiene ningún sentido.
¿Qué debe hacer antes un profesor enseñar
o motivar?
Primero,
motivar, y luego saber transmitir y ser un comunicador. No hay que ser un genio
de la Física, las Matemáticas o la Química porque lo que vas a explicar es muy
básico.
Pero hay algunos profesores anquilosados
en las formas tradiciones.
No
son algunos, son la mayoría. Aplicar metodologías innovadoras requiere una
formación que actualmente es deficiente. Los profesores de instituto son
ingenieros, matemáticos, químicos... y no han dado ni una sola asignatura
durante su formación para ser profes. Y luego, dan un máster
durante un año, que tampoco está bien pensado, y en un año ya sabes todo lo que
debes saber para ser docente, y que va, que va... años luz les queda por
aprender. El máster debía durar dos años, quizá, con uno entero de prácticas.
¿Habría que enfocar, entonces, de otra
manera la carrera de los docentes?
Claro.
Cuando yo estudié en Granada, había una especialidad en Matemáticas que se
llamaba Didáctica de las Matemáticas. Son licenciados en esta materia,
especialistas en enseñar Matemáticas. Eso debería existir en todas las
titulaciones que pudieran acabar dando clases. Pero si en los institutos la
metodología está anticuada, en la Universidad, apaga y vámonos. Puedes ser el
mejor matemático del mundo, pero es que no tienes que serlo. Para dar clase en
un instituto, tienes que ser el que mejor transmita lo que los niños tienen que
aprender. Y ahí fallamos los docentes.
Los profesores cuentan que quien se sale
de la rutina acaba machacado por los padres o los directores de los centros.
Es
así. Si innovas, vas a tener problemas con el inspector o el director de tu
centro, aunque a mí no me ha pasado y me han apoyado. También con los padres.
Una vez, un padre me dijo: 'puede usted hacer el favor de dar clase como Dios
manda'. Pero, cuando ven los resultados, la cosa cambia: 'siga, siga usted'.
La burocracia a la que deben hacer frente
los profesores en los institutos tiene un difícil encaje con una manera de
enseñar como la suya.
La
burocracia no tiene encaje en ninguna manera de enseñar. Es tal la cantidad de
documentación que tenemos que rellenar, que hay compañeros que me dicen: 'o doy
clase o relleno papeles'. Solo con preparar las clases, corregir exámenes,
preparar actividades y revisar cuadernos te comes el tiempo del horario. Un
tutor de Secundaria está enterrado en papeles y eso es un disparate y triste porque
son papeles que no ve nadie. Hacemos educación preventiva, igual que los
médicos hacen medicina preventiva para que no los denuncien. Papeles por si los
pide el inspector, por si...
Y luego hay alumnos con los que debe ser
realmente complicado.
Claro.
El hecho de que utilices metodología innovadora no significa que todos tus
alumnos vayan a trabajar mucho. A una madre, le expliqué que su hijo había
suspendido porque, entre septiembre y febrero, solo había estudiado 21 minutos.
Supongo que ese tiempo se le quedará
registrado de los vídeos.
Sí,
con una aplicación que registra el tiempo que cada alumno pasa con los vídeos
que subo al canal. Señora, su hijo no necesita adaptaciones, ni papeles, ni
historias. Necesita estudiar. Se le demuestro y lo increíble es que esta
persona te busca la excusa y cubre al niño. No te dice que le va a pedir que
estudie más.
¿Alguna receta contra el fracaso escolar?
Hay
una idea muy bonita sobre el papel, pero no es real. No todos los niños tienen
las mismas capacidades ni las mismas necesidades educativas. En el norte de
Europa hay una Secundaria adaptada. Y algo más; si quieres dedicarte a algo tan
importante como la educación, debes ser el mejor. Mejorarían las cifras si se
seleccionara bien a los docentes.
Y luego están las distintas leyes
educativas que cada partido aprueba cuando está en el gobierno.
Ocho
leyes en cuarenta años; eso lo resume todo. Una ley educativa debe durar lo
mismo que una generación: desde Infantil hasta la Universidad. Y así puedes
decir si funciona o no. Las leyes educativas deberían ser aprobadas por 2/3 de
la Cámara, no por mayoría. Así, la derecha y la izquierda se tendrían que
sentar y negociar, y cuando llegara el otro al poder, no la cambiaría. No sería
la ley del PSOE ni del PP, sino una ley en la que estemos a gusto todos. No hay
ni un solo partido político que haya tenido la generosidad de hacer esto."
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